Un grupo que se supone son universitarios, marchó, protestó y destruyó puertas y ventanas del edificio de la Rectoría. Los chicos y chicas, la mayoría identificados con Morena, no quieren pagar inscripción ni colegiaturas a la UACh para que se mejoren las instalaciones y la calificación mínima bajarla a seis.
Claro que nadie quisiéramos pagar colegiaturas, queremos instalaciones de lujo y que no hubiera reprobados, pero eso no se puede, menos cuando el Gobierno Federal, no le mete ni un centavo a la educación en Chihuahua; hay que dedicarse más, para superar un seis, los moshs, que nunca egresaron de la universidad, no tiene cabida, por lo menos en las unis de la entidad. Ellos fueron agitadores y punto.
Es evidente que la movilización fue de personajes ligados a Morena; en donde aparece la figura del diputado Oscar Castrejón Rivas, quien cobra en la UACh y agita desde las aulas.
Las causas son muy vendibles, se entienden como vendibles, pero llegar a vandalizar el icónico edificio que es patrimonio de los chihuahuenses y de los mismos universitarios (de ayer y de hoy), no hay forma de admitirlo, ni son justificables.
Evidencian que se trata de anarquía; buscan la desestabilización del Alma Mater, la izquierda es especialista y Castrejón en eso da cátedra y más si tiene la asesoría de personajes innombrables en Chihuahua.
Irrelevante debate político en Chihuahua
El primero y único debate entre los candidatos a la Presidencia Municipal de Chihuahua, transcurrió más o menos bajo presupuesto, con un formato muy pobre en cuanto a contenido, que no permitía a los candidatos inspirarse para debatir. En próximo análisis o intento de, iremos a los detalles.
El alcalde Marco Bonilla, que va por la reelección, dice que fue el que ganó la discusión al llevar las mejores propuestas y conocimiento de los temas.
Los candidatos de Morena-PT y Movimiento Ciudadano, Miguel la Torre y Enrique Valles, fueron muy puntuales contra el puntero, no se vieron tan mal, solo que el formato del debate, no los dejó avanzar.
Con poco o nada qué, perder estuvieron los candidatos de los partidos nonos y nuevos, sólo aprovecharon la oportunidad de la difusión gratuita del evento.
Muchos nervios y reparto de culpas para todos desde el bloque de los peques, o sea, en contra de los tres primeros, sobre todo de Rosario Montoya de Verde e Hilda Sánchez de México Republicano, en donde la participación de Daniel Quezada de Pueblo, fue la mejor de este grupo de competidores, pero con ninguna posibilidad en la elección.
El descaro de la Cuarta Transformación
Ni siquiera en la hegemonía priista, se habían registrados los excesos del poder, en el uso de recursos públicos, para favorecer las candidaturas oficiales.
Quienes se dicen ser la esperanza y un real cambio, es decir, Morena y su presidente López Obrador, están utilizando toda la maquinaria oficial, para conservar la Presidencia de la República y mínimamente el Congreso y Senado.
Lo que ha llamado la atención, es que, de manera descarada, empleados del Servicio Postal Mexicano, están repartiendo volantes no timbrados, de Morena, bajo el enunciado de vota por todo Morena.
Lo mismo ocurre con los recibos de la Comisión Federal de Electricidad, los que traen engrapado en mismo volante, seguramente a muchos ya les llegó.
Que delicado, pero así trascurre. Lo más peor si algo existe, es que, en varios estados de la República Mexicana, elementos de la Guardia Nacional, escoltan a siervos de la nación, para que retiren propaganda de los opositores.
Una antidemocracia y totalitarismo, que ni en los peores tiempos de la partidocracia se había vivido en México. Testimonios, fotografías y videos están por todos lados.
