La madre y 16 familiares de Ovidio Guzmán López, alias El Ratón, cruzaron la frontera de Tijuana a San Diego bajo protección del gobierno de Estados Unidos. Según el exjefe de operaciones internacionales de la DEA, Mike Vigil, temen represalias por la próxima colaboración de Ovidio con las autoridades estadounidenses.
El acuerdo forma parte de su decisión de declararse culpable y testificar contra Ismael El Mayo Zambada, considerado por Estados Unidos como el narcotraficante más poderoso del mundo. “Si su familia se quedaba en Sinaloa, los mataban”, dijo Vigil.
La entrega ocurrió el pasado viernes. La familia viajó de Culiacán a Tijuana y se entregó en la garita de San Ysidro, donde fueron recibidos por agentes del FBI, CBP y otras agencias federales.
El abogado de Ovidio, Jeffrey Lichtman, confirmó que tanto él como su hermano Joaquín Guzmán López buscan beneficios como testigos protegidos. Su audiencia fue reprogramada para el 9 de julio.
En paralelo, Iván Archivaldo Guzmán, líder de la facción de La Chapiza, habría escapado por un túnel escondido en un clóset durante un operativo en Culiacán, según reportó The Wall Street Journal. Las fuerzas especiales capturaron a sus lugartenientes, pero él logró huir.
La DEA mantiene una recompensa de 10 millones de dólares por Iván Archivaldo, acusado de liderar operaciones de tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos.