El cínico senador morenista Gerardo Fernández Noroña, desató una nueva ola de indignación y polémica al defender abiertamente un costoso viaje que tuvo en avión privado valuado en 280 mil pesos, un hecho que choca frontalmente con el discurso de austeridad de la autodenominada Cuarta Transformación y que la presidenta Claudia Sheinbaum ha pedido respetar a sus militantes.
Al ser cuestionado en la cámara baja por las contrariedades en su forma de hablar y actuar ante los reporteros, “Es un taxi aéreo”, dijo Fernández Noroña.
Posteriormente, refirió: “No tengo nada que transparentar, voy a seguir recorriendo el país. La presidenta ha dicho que los aviones privados se pueden justificar”. Sin embargo, Noroña defendió que él tiene otra opinión sobre la austeridad del partido.
El fin de semana pasado, Fernández Noroña fue captado viajando en avión privado de 2 mil dólares la hora, usando el avión 6 horas para su gira en Coahuila, lo equivalente a 12 mil dólares o 280 mil pesos. Y aseguró que tomó el vuelo privado porque tenía poco tiempo para la gira que duró 2 días.
Ante esto, el senador no mostró signo alguno de arrepentimiento o pena, sino una actitud de cinismo, pues al ser cuestionado sobre el origen de los recursos para un vuelo tan costoso, Noroña respondió con ironía.
La situación escaló cuando Fernández Noroña fue cuestionado por Gerardo Segura, reportero de Azteca Noticias, quien lo exhibió por sus constantes contradicciones entre su discurso público y su estilo de vida.
Asimismo, al ser cuestionado sobre quién pagó este vuelo de casi 300 mil pesos, el morenista se burló diciendo que había sido el empresario Ricardo B. Salinas Pliego y el reportero señaló que no debería de estar declarando palabras que no son verdad.
El senador Noroña se ha caracterizado por un comportamiento de cinismo nunca antes visto en la política mexicana.