El descubrimiento de un túnel transfronterizo entre Ciudad Juárez y El Paso, Texas, trajo consigo no solo titulares, sino también una peculiar disputa entre los gobiernos de México y Estados Unidos. Lo que debió ser una operación conjunta para enfrentar al crimen organizado quedó empañado por versiones encontradas y mensajes contradictorios.
¿Quién lo encontró?
Del lado mexicano, el gobierno emitió un comunicado breve, casi lacónico. Sin entrar en detalles, atribuyó el hallazgo a una colaboración entre la Marina, la Secretaría de la Defensa Nacional y la Agencia Estatal de Investigación. El único detalle ofrecido fue que el túnel tenía “dirección hacia el norte,” una obviedad que no aporta claridad.
En contraste, la versión estadounidense, a través de la Patrulla Fronteriza, fue mucho más detallada:
- Origen del túnel: Cerca de “La X,” un punto conocido en Ciudad Juárez.
- Destino: Desembocaba en los desagües del río Bravo (Grande) en El Paso, Texas.
- Uso: Identificado como una ruta para el tráfico de drogas, armas y migrantes.
- Responsables: Atribuido al grupo delictivo “La Empresa.”
Según los estadounidenses, el túnel fue detectado tras observar movimientos de migrantes ilegales en la zona, un hecho que contradice la narrativa mexicana de liderazgo en el operativo.
Minimización sospechosa
¿Por qué el Gobierno de México optó por minimizar el hallazgo? Esta actitud levanta sospechas y alimenta preguntas incómodas:
- ¿Se trata de proteger la imagen de las instituciones de seguridad?
- ¿Es un intento de desviar la atención sobre la incapacidad para controlar estas actividades?
- ¿O es simplemente falta de coordinación y transparencia en los comunicados oficiales?
En un contexto donde la soberanía y el control territorial son parte central del discurso gubernamental, aceptar que el hallazgo fue liderado por Estados Unidos podría percibirse como una señal de debilidad. Sin embargo, la falta de claridad solo socava la confianza pública y refuerza la percepción de que las autoridades están un paso detrás del crimen organizado.
El trasfondo del túnel
Lejos de ser un simple agujero, este túnel es un ejemplo de la sofisticación y capacidad logística de los cárteles mexicanos. Estas estructuras son una herramienta clave para operaciones de contrabando multimillonarias. Su existencia pone en evidencia:
- La debilidad en la vigilancia fronteriza.
- La impunidad con la que operan los grupos criminales.
- La necesidad de una colaboración real y efectiva entre ambos países.
Síntoma de un problema mayor
Este caso no es aislado, sino un reflejo de la dinámica fronteriza actual. Mientras México y Estados Unidos sigan enredados en disputas de protagonismo, los túneles seguirán proliferando y los cárteles continuarán explotando las brechas en la seguridad.
La pregunta clave no es solo quién encontró el túnel, sino cómo evitar que se sigan construyendo.
Los ciudadanos de ambos lados de la frontera merecen más que comunicados vagos y acusaciones cruzadas. Merecen un esfuerzo coordinado, transparente y decidido para enfrentar el verdadero problema: el poder y alcance del crimen organizado que opera en las sombras, mientras las autoridades parecen pelear por el crédito de lo evidente.
En este túnel, lo que está verdaderamente en juego no es el hallazgo, sino la confianza en las instituciones. Y esa, por ahora, sigue siendo una deuda pendiente.
Los Primeros 100 Días de Claudia Sheinbaum: Retórica y Realidades
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, presentó su informe de los primeros 100 días al frente del país, un ejercicio que, lejos de ser un balance objetivo, se convirtió en una continuación de las ofertas de campaña y en una reafirmación del discurso oficialista de la Cuarta Transformación.
Verdades a Medida
El mensaje estuvo cargado de afirmaciones que buscan presentar un panorama favorable. Sin embargo, varios de los logros presumidos parecen más vinculados a circunstancias externas o a realidades manipuladas:
- Remesas: Un rubro cuyo mérito recae en los millones de mexicanos que trabajan en el extranjero, no en el gobierno.
- Creación de empleos y salarios mínimos: Logros cuya relación con las políticas gubernamentales es discutible.
Herencia de Visión
Al igual que su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, Sheinbaum pinta un país que muchos mexicanos no reconocen en su cotidianidad. Entre sus declaraciones destacan:
- “Una economía fuerte y sólida.”
- “Disminución del 19 % en la inseguridad y violencia.”
- “Obras de infraestructura en todas las entidades federativas.”
Aunque estas afirmaciones se presentan como hechos incuestionables, la percepción ciudadana cuenta otra historia.
Salud Pública: Ahorros que No Alcanzan
Uno de los puntos más controversiales del informe fue el anuncio de un supuesto ahorro de 23 mil millones de pesos en la licitación de medicamentos. Este dato, lejos de ser un motivo de orgullo, evidencia una crisis en el sistema de salud:
- Falta de medicamentos básicos.
- Infraestructura hospitalaria insuficiente.
- Necesidad urgente de inversión, no de recortes.
Ciencia y Educación: Promesas sin Fondo
La presidenta afirmó que “México será potencia científica,” una meta que choca con la realidad de recortes presupuestarios a universidades, ciencia e investigación. La contradicción entre el discurso y las acciones sigue siendo evidente.
La Judicialización del Poder
En línea con la agenda de su predecesor, Sheinbaum avanza en la transformación del Poder Judicial, prometiendo independencia mediante la elección popular de jueces. Sin embargo, esta propuesta genera preocupaciones sobre la autonomía real de este poder frente al Ejecutivo.
Relaciones Internacionales: Mensajes para la Galería
En cuanto a la relación con Estados Unidos, Sheinbaum aseguró que habrá “coordinación y colaboración, nunca sumisión.” Una declaración políticamente correcta destinada a satisfacer a los sectores más nacionalistas, pero que difícilmente refleja la complejidad de las relaciones bilaterales.
Un Zócalo que No se Llena
El acto en el Zócalo, símbolo de respaldo popular, dejó un sabor agridulce. La asistencia estuvo lejos de lo esperado, lo que evidencia que Sheinbaum no tiene el arrastre de López Obrador. Las justificaciones sobraron, pero el mensaje quedó claro: su liderazgo aún no genera la misma conexión con las masas.
Marco Bonilla: Entre Leña y Popularidad
El alcalde de la capital, Marco Bonilla Mendoza, no dejó pasar el temporal gélido sin aprovechar la oportunidad para proyectar su imagen. Con costales de leña, juguetes, cobijas y Rosca de Reyes, visitó a vecinos del municipio de Cuauhtémoc, llevando no solo apoyo, sino también una dosis calculada de presencia política.
Presencia más allá de la capital
En política, cualquier evento es un buen pretexto para posicionar nombre e imagen, y Bonilla lo sabe. No es la primera vez que el edil sale de su zona de influencia inmediata para dejar huella en otras regiones del estado.
Sin embargo, su agenda reciente demuestra que estas visitas no siempre salen según lo planeado. Una cita similar al municipio de Camargo, programada para el fin de semana pasado, fue cancelada debido a la tormenta invernal.
Candil de la calle…
Es innegable que Bonilla se mueve, y mucho. Pero este activismo constante plantea una pregunta:
¿Está atendiendo con igual ímpetu las necesidades de la capital que gobierna?
El riesgo de que le coloquen el dicho popular “Candil de la calle, oscuridad de tu casa” está latente. Los ciudadanos de la capital estarán atentos para evaluar si estas giras en busca de popularidad no se convierten en un pretexto para descuidar la administración local.
¿Acciones genuinas o política anticipada?
Es difícil no interpretar estas visitas como un movimiento estratégico con miras a algo más grande. La proyección estatal, el contacto con municipios clave y la constante exposición pública sugieren que Bonilla está pensando más allá de su cargo actual.
Aunque llevar leña y juguetes es un gesto noble, es importante que estas acciones no sean solo eso: gestos. La ciudadanía espera consistencia, resultados tangibles y un enfoque claro en resolver los problemas de quienes le dieron el voto.
Por ahora, Marco Bonilla sigue construyendo su imagen con movimientos calculados. La pregunta es si estas acciones resonarán con autenticidad entre la población o si serán vistas como parte del juego político de siempre. El tiempo, y los votantes, tendrán la última palabra.