Por Jack Ro
Ciudad Juárez. – El Colectivo Arte Juárez se enorgullece en anunciar la participación de la docente universitaria Diana Cecilia Lerma González, en la Muestra XVIII, que se llevará a cabo en el Centro Cultural de las Fronteras, en la Sala Oro, este febrero 14 de febrero de 2025 a las 8:00 pm., cuya obra siempre sorprende e inspira a sus admiradores.
Este evento contará con la presencia de 39 talentosos artistas provenientes del norte de México, quienes exhibirán sus obras más recientes.
La expresión de las obras de esta destacada pintora está relacionada con la arquitectura y con el arte de la pintura. El diseño arquitectónico y el arte de la pintura han estado entrelazados a lo largo de la historia, complementándose y enriqueciéndose mutuamente. Desde la antigüedad, el diseño arquitectónico y la pintura han convivido en el mismo espacio.
Los frescos de las civilizaciones egipcia y romana, por ejemplo, adornaban las paredes de templos y palacios, creando ambientes impresionantes.
Ha experimentado en el trazo y el diseño la evolución de sus creaciones a través de los años. La relación entre la arquitectura y la pintura es muy estrecha, ambas comparten principios fundamentales como: La composición, la perspectiva,la luz,el color y la expresión simbólica .
El diseño arquitectónico crea espacios físicos que pueden ser elevados por la pintura.
Las estructuras arquitectónicas sirven como lienzos tridimensionales donde los pintores pueden expresar sus visiones artísticas en una interacción visual. Los desarrollos en la perspectiva en la pintura del Renacimiento en una influencia mutua tuvieron un profundo impacto en el diseño arquitectónico, cambiando la manera en que los espacios eran concebidos y representados.
Uno de los grandes Arquitectos del siglo XX que influenciaron su vida profesional fue, Luis Barragán, arquitecto mexicano que se caracteriza por el uso Magistral y el color, la luz, el agua y la relación entre la arquitectura y el paisaje transmitiendo Serenidad en el entorno. Luis Barragán es una figura emblemática en la arquitectura moderna mexicana.
Su propuesta arquitectónica se caracteriza por la integración de la luz y el color, así como por un profundo respeto por los espacios exteriores y la naturaleza. Barragán combinó elementos de la tradición mexicana con las ideas modernistas que aprendió durante su viaje a Europa, especialmente de Le Corbusier.
Algunas de sus obras más destacadas incluyen la Casa Estudio Luis Barragán en Ciudad de México, que es Patrimonio Mundial de la UNESCO, y los Jardines del Pedregal de San Ángel, donde utilizó la piedra volcánica local para crear un entorno armonioso.
Lerma Gonzales, espíritu que experimenta en su estilo de pintar se basa en los conceptos del realismo, lo figurativo y lo abstracto.
El realismo es un movimiento artístico que surgió en el siglo XIX como una reacción contra el romanticismo y su idealización de la realidad. Los artistas realistas se enfocan en representar el mundo tal como es, sin embellecerlo ni idealizar.
Las obras realistas a menudo retratan la vida cotidiana, la gente común y las escenas rurales y urbanas. Este estilo busca una representación fiel y precisa, con atención al detalle y una paleta de colores naturales. Uno de los exponentes más conocidos del realismo es el pintor francés Gustave Courbet.
El arte figurativo se refiere a las obras que representan formas reconocibles del mundo real, especialmente figuras humanas y animales.
A diferencia del realismo, el arte figurativo no necesariamente busca una representación exacta y puede incluir estilizaciones, simplificaciones y alteraciones de las formas.
Este estilo ha sido predominante en la historia del arte, desde las pinturas rupestres hasta el arte contemporáneo. Ejemplos notables incluyen las obras del Renacimiento, como las de Leonardo da Vinci y Miguel Ángel, así como las obras más modernas de artistas como Pablo Picasso en su período figurativo.
El arte abstracto se aleja de la representación literal de la realidad y se enfoca en la expresión a través de formas, colores, líneas y texturas que no tienen una referencia directa en el mundo real.
Este estilo busca evocar emociones, sensaciones y conceptos a través de composiciones no figurativas.
Los artistas abstractos experimentan con la forma y el color de manera libre y creativa. Wassily Kandinsky y Piet Mondrian son dos de los artistas más influyentes en el desarrollo del arte abstracto.
Los arquitectos y pintores exploran juntos el uso del color y la luz. Mientras los arquitectos juegan con la luz natural en sus diseños, los pintores replican este juego de luces y sombras en sus obras. Arquitectura funcional:
Los arquitectos diseñan estructuras que no solo sean funcionales sino también estéticamente agradables. La pintura puede jugar un papel crucial en este aspecto, transformando espacios funcionales en verdaderas obras de arte.
Los murales y las pinturas decorativas no solo embellecen los espacios arquitectónicos, sino que también pueden cumplir funciones específicas, como transmitir mensajes culturales o históricos en un arte aplicado para ornamentar las ambientaciones de los humanos en un lenguaje que comunica y recrea su imaginación.
Ambos géneros comparten el objetivo de expresar la creatividad humana y pueden interactuar entre sí, como en el caso de los frescos y los murales arquitectónicos. Sin embargo, su enfoque, técnicas y materiales difieren considerablemente.
En la arquitectura moderna, el vínculo sigue siendo fuerte. Artistas y arquitectos colaboran para crear instalaciones integradas donde las fronteras entre las disciplinas se difuminan.
Por ejemplo, el Guggenheim de Bilbao, diseñado por Frank Gehry, es una obra maestra arquitectónica que se fusiona con las exposiciones artísticas en su interior.
Ambas disciplinas buscan expresar y provocar emociones. Mientras la arquitectura envuelve y acoge, la pintura puede envolvernos en narrativas y conceptos visuales, amplificando la experiencia sensorial y emocional del espacio.
La diferencia entre el género de la arquitectura y el género de la pintura: La arquitectura se centra en diseñar y construir espacios físicos, como edificios, puentes, y otros entornos habitables. No solo se preocupa por la estética, sino también por la funcionalidad y la seguridad.
Utiliza materiales como ladrillo, cemento, vidrio, acero, entre otros. La creación arquitectónica implica conocimientos técnicos avanzados y una comprensión de la física y la ingeniería.
La arquitectura está pensada para perdurar a lo largo del tiempo y soportar condiciones ambientales diversas. Generalmente, las obras arquitectónicas son de gran escala y están integradas en el entorno urbano o natural.
La trayectoria de Diana Cecilia como artista plástica se centra en la exploración de la lucha, la resiliencia y la transformación a través de la pintura, buscó plasmar historias de fortaleza en medio de la adversidad utilizando la luz y el color como símbolos de esperanza.
La pintura es una forma de arte visual que se enfoca en la creación de imágenes bidimensionales.
Su objetivo principal suele ser estético o expresivo. Utiliza materiales como óleo, acrílico, acuarela, y técnicas como el pincel, la espátula, el aerosol, entre otros.
Aunque algunas pinturas pueden durar siglos con el cuidado adecuado, son más susceptibles al deterioro que las estructuras arquitectónicas debido a factores como la humedad, la luz y el tiempo. Las pinturas varían en tamaño, desde pequeñas obras hasta murales grandes, pero son esencialmente bidimensionales.
En su obra de las que más satisfacciones le ha creado es la titulada “Más allá de las sombras” representó una Mujer que avanza en un entorno desolado enfrentando dificultades, pero con la determinación de salir triunfante. En otra de sus obras se encuentra la Grisalla refuerza la dureza del camino mientras que un punto de color simboliza la ternura y la esperanza que persisten en los momentos más oscuros.